Piden presupuesto real para combatir la violencia de género

Acusan al gobernador de “no tomar dimensión” de la problemática de los feminicidios. Piden se declare la emergencia para lograr un presupuesto para terminar con asesinatos de mujeres. Reiteran el pedido de renuncia de Rosario Romero.


El pedido de justicia, presupuesto para combatir la violencia y la renuncia de funcionarios, sigue vigente.

Los días excepcionales que atraviesa el país  parecen haber expulsado allá lejos y en el tiempo, gran cantidad de hechos que sucedieron hace pocas semanas, tal es el caso de Fátima Acevedo. Asesinada por su ex pareja Jorge Martínez, hoy internado en el Hospital San Martín por haberse tragado una cuchara por miedo a que sus “compañeros de celda”, lo asesinaran, según sus palabras.

Fátima recorrió Tribunales infinidad de veces para no terminar como terminó: asesinada y descartada. Pero a la Justicia no le bastó con su inoperancia, hoy también busca instalar que la joven madre que tenía pánico a su agresor (por lo que se refugió en una repartición pública que debía protegerla) fue hasta la precaria vivienda del mismo, caminó 800 metros con él por un descampado hasta el borde de un pozo de 60 metros de profundidad y “encontró la muerte”. Todo por la promesa de un celular. Repasemos el relato intrínseco: La víctima es culpable. “Quisimos defenderla” pero ella y su avaricia lograron que el asesino sólo debiera apretarle el cuello.

Leandro Dato, Fiscal de la Unidad de Género, quien recibió a Fátima dos veces (y dos veces su secretaria), a horas del hallazgo del cuerpo de la joven remarcó la posibilidad de la compra de un celular “hay pruebas de que ingresaron a Mercado Libre” y que “no falló el botón anti pánico, la persona tiene que accionarlo”, deslizó además, a modo de que la víctima estaba a gusto con Martínez, sin aclarar que el sistema mediocre de “seguridad”, es una aplicación del dispositivo telefónico que sólo funciona si hay internet.

Enfoque Propio creyó necesario hacer este repaso aunque los hechos hayan ocurrido, para la sociedad y mediáticamente hablando, entre el 1 y el 8 de marzo porque un nuevo intento de feminicidio ocurrido el lunes en Victoria que dejó a una mujer internada y a su agresor muerto –se suicidó-, visibilizó en los medios, nuevamente el pedido de medias extremas, pese a que el gobernador Gustavo Bordet ya había adelantado cambios en la lucha contra esta problemática (Ver: “Bordet habló de Fátima y anunció cambios”).

Nadia Burgos, dirigente del Movimiento Social de los Trabajadores (MST), partido enrolado en el frente de Izquierda a nivel nacional, y militante de la Asamblea de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis y no Binarios subió a sus redes sociales un video remarcando esta situación: “Seguimos en cuarentena y cientos de mujeres hoy están en peligro. El aislamiento total y la violencia de género, generan consecuencias tremendas como el intento de feminicidio de hoy en Victoria”.

“Mientras tanto, el Estado en voz de Bordet y –Laura- Stratta (vicegobernadora de la provincia), rompieron el silencio el fin de semana tras el feminicidio de Fátima Acevedo. Ese silencio roto no nos deja tranquilas, las medidas de Bordet son efectistas y parciales”, enfatizó.

El freno a esta realidad violenta y un cambio de paradigma sería para Burgos “la reglamentación de la –Ley -10.058 no será real si no hay un presupuesto acorde. Las leyes anti violencia sin presupuesto, no generan un cambio real para las víctimas de violencia de género”.

La reglamentación a la que se refiere la referente del MST, es la promulgada por el Poder Ejecutivo entrerriano el jueves 2 de febrero de 2012 adhiriendo a la ley Nacional Nº 26.485: “De protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que se desarrollan sus relaciones interpersonales”.

“Bordet debe darse cuenta de la situación que estamos viviendo, una mujer cada 23 horas muere en nuestro país víctima de feminicidio, estamos en una situación de emergencia, Bordet, necesitamos que declares el presupuesto de emergencia ya”, reclamó Burgos directamente.

Otra cuestión importante, según destacó en las imágenes de las redes sociales es que “tomen decisiones concretas en la temática, y esas decisiones empiezan con la renuncia de –la Ministra de Gobierno y Justicia Rosario- Romero que habló en defensa del Estado en el caso de Fátima. Si hubieran actuado bien, ella estaría con nosotras”.

Para Burgos, “justicia por Fátima también es que se hagan a un costado todos aquellos que fueron responsables de su feminicidio y que el Estado escuche a quienes pedimos políticas reales para erradicar la problemática. La emergencia en violencia de género es una necesidad y la urgencia es ahora”.